Distheguy es un proyecto que encontró sus inicios como un alter ego de Alex Martínez cuando él apenas tenía 18 años y quería expresar. sus opiniones sobre música y moda en las redes sociales. A pesar de que inició como una forma de comerse al mundo y hacer un poco de todo, la música siempre fue el camino que Alex sabía que debía seguir para trazar el rumbo de su proyecto.
A pesar de haber comenzado con un enfoque más cercano al trap y la música urbana, influencias que encontramos en sus trabajos anteriores como “No eres pa´mi” o “Kien dices ser”, Distheguy fue alejandose. de eso para cimentar su verdadera forma a partir de lo que Alex escuchaba cuando era niño. Es gracias a esta influencia y al enojo que él mismo dice haber sentido hacia la música del espectro urbano al ya no sentirse representado, que llegaron a su esencia y sonido el pop, el pop-punk de los 2000s y actos como Dominic Fike, The Neighbourhood, Blink 182 y sobre todo Moderatto, más específicamente Jay de la Cueva.
Jay de la Cueva es una influencia inesperada, pero nada ilógica dentro del trabajo de Alex como Distheguy, una que se manifiesta claramente en los coros de “Kien dices ser” o “Escorpio”. Después de todo, creció escuchándolo y se reencontró con él cuand,o años después, comenzó a escuchar otros de sus proyectos como Fobia o Titán. Jay hace sentido en el universo de Distheguy al representar el contraste y transgresión que puede existir entre el tipo de música que se trabaja y la estética de la persona detrás de ella. Así es como podemos percibir a Alex y su estética de trabajo tan auténtica, una que ha crecido y se ha transformado para, en sus propias palabras, “darle nombre a esos sueños de adolescente.”
Teenage Dreams
Es emulando esta idea que surge Teenage Dreams, el EP que es su lanzamiento más reciente y gracias al cual. tuvimos la oportunidad de platicar con Distheguy para saber más de los sentires e inspiraciones detrás del material que promete darlo a conocer en todas las tonalidades pastel que lo componen. En sus propias palabras, Alex nos dice que. este EP es un autoanálisis muy profundo:
“Sí me ha ayudado a entender cómo y de dónde viene todo lo que estoy haciendo y escuchando. Me ha permitido analizar la manera en la que estoy haciendo música, la forma en la que estoy escribiendo. Terminar este proyecto ha sido lo más bonito que ha pasado desde que empecé con Distheguy.”
Alex describe Teenage Dreams como una moneda y sus dos caras, una dualidad de sonidos que se entremezclan pero que siguen una lógica narrativa escondida entre sus letras. El lado sol. lo representan los sonidos nuevos y la ya icónica vibra kute & lovely que encontramos en el single “Kien dices ser” -en palabras de Alex, la favorita de tode aquel que escuchó el material antes de su lanzamiento- y “Escorpio” -nuestra favorita personal, así como la suya-. Por su parte, el lado. águila y sus sonidos más influenciados por el R&B toman. forma en “Pendientes Chanel” y “No Siento la Cara”.
La confección de Teenage Dreams a partir de esta dualidad está cálidamente calculada, especialmente en la manera en la que ha sido presentada a su público. Los videos, así como el single y la manera en la que las canciones se distribuyeron a lo largo de sus 14 minutos y 42 segundos de duración, pretenden recalcarle a les conocides, y demostrarle a quienes acaban de llegar, que la música de Distheguy no ofrece una única tonalidad, por el contrario, apuesta siempre por los matices, la distinción y una variedad refrescante.
No quiero saber tu luna ni tus grandes 3
La música de Alex nos permite acercarnos a su corazón y cotidianidad; es de esta última que surgen las constantes referencias astrológicas, unas que se gestaron de manera desapercibida incluso para él. “‘Aquario’, que fue mi primera rola con esa temática, fue inspirada por un trip donde yo salía con una chica que estaba muy metida en el horóscopo, gracias a eso ahora incluso tengo CoStar en mi teléfono. Cuando terminé de escribir la canción simplemente supe que se tenía que llamar así.” A pesar de que ni “Aquario” ni “Escorpio” contienen referencias directas a estos temas además de sus nombres, seguimos encontrando referencias en otras de las canciones de Alex, como es el caso de “Kien Dices Ser”. Inspirado también en Álvaro Díaz y su “Piso 13 (Mia Wallace)” encontramos a Distheguy convirtiendo la posible serie de 12 signos en una forma creativa y cercana de dejar huevitos sorpresa para aquellas personas que pasen por su vida y quieran quedarse a escuchar.
Caminar acompañado
El talento en Distheguy empieza con Alex, pero el cantante se asegura de recordarnos que junto con él trabajan una gran cantidad de personas cuyos aportes convergen en el arcoíris pastel que es todo el proyecto. Sus productores son parte clave; los primeros con los que trabajó fueron nada más y nada menos que sus mejores amigos: Olloqui y Kali. “Ellos ya tenían su proyecto y la experiencia. Yo llegué sin saber nada, ni lo técnico, ni lo artístico, pero ellos se encargaron de enseñarme. Empecé a hacer mis primeras canciones con ellos mientras estábamos tomando, algo más por hobby, hasta que salió la primera.”
El proceso creativo siempre es orgánico. El intercambio de ideas, las referencias bien marcadas y el cuidado entre ambas partes está siempre presente. “Nunca he trabajado con alguien con quien no he convivido lo suficiente. La única vez que lo hice la rola acabó mosqueadísima y la terminé más por compromiso que por otra cosa. El trabajo que ha salido ha salido únicamente porque he trabajado con grandes amigos.”
Para Distheguy la amistad permea en todos los procesos creativos en los que se envuelve, esto convierte a su música en un trabajo que se siente más cálido y cercano, tanto para las personas involucradas como para el público. “Algo importante de cuando estás haciendo algo con tus amigos es que puedes darte tiempo de enseñar y aprender cosas, es un proceso de crecimiento muy cabrón. Trabajar juntos se convierte en darle valor al crecimiento del otro.”
El viaje personal y artístico de Alex como Distheguy apenas comienza y nos tiene muchísimas cosas preparadas para el futuro cercano. Mientras tanto, tener presentaciones en Acapulco o Guadalajara son prioridad en su lista de deseos; y mientras esperamos su próximo material, el sonido tan fresco de “Escorpio” y todo Teenage Dreams no dejará de sonar en nuestros audífonos, y esperamos que en los tuyos tampoco.
